El estrés no solo se refleja en el estado de ánimo o en el cuerpo, también deja huella en la salud de tu boca. Problemas como dientes fracturados, encías inflamadas o sensibilidad dental pueden estar directamente relacionados con altos niveles de tensión, y conocer esta conexión es clave para prevenir daños y cuidar tu sonrisa. Por ello, en este artículo te hablamos de la relación entre estrés y salud bucodental.
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¿Cómo afecta el estrés a la salud bucodental? ç
Bruxismo: el rechinar silencioso
Uno de los efectos más comunes del estrés es el bruxismo, el hábito inconsciente de apretar o rechinar los dientes, especialmente por la noche. Esto puede provocar desgaste dental, fisuras o incluso fracturas.
Encías inflamadas o sangrantes
El sistema inmunológico se debilita con el estrés, lo que favorece la aparición de inflamación gingival. Las encías pueden volverse más sensibles, sangrar al cepillarse y ser más propensas a infecciones.
Aftas y llagas bucales
En momentos de gran tensión, algunas personas desarrollan úlceras dolorosas en la boca, conocidas como aftas. Aunque no son peligrosas, pueden ser muy molestas.
Sequedad bucal
El estrés también puede alterar la producción de saliva, generando una sensación constante de boca seca, lo que aumenta el riesgo de caries y halitosis.
¿Qué se puede hacer?
- Utiliza férulas de descarga si padeces bruxismo.
- Mantén una buena higiene bucal diaria.
- Intenta incorporar técnicas de relajación como meditación o respiración profunda.
- Acude al dentista ante los primeros síntomas.
Ahora que ya conoces la conexión entre estrés y salud bucodental, escucha a tu cuerpo y a tu boca para evitar complicaciones. ¿Notas que el estrés está afectando a tu sonrisa? ¡Pide una cita con nuestro equipo y te ayudaremos a recuperar el bienestar dental que mereces!
